Todos queremos tener tiempo libre para poder pasarlo con los niños, por desgracias la conciliación todavía hoy es muy complicado por lo que tenemos que limitarnos a los fines de semana para poder pasar tiempo de calidad con nuestros hijos.
Están las tardes de sábado de lluvia, esa lluvia casi torrencial que nos impide salir al parque, bueno, nos impide salir casi que a cualquier sitio, esas tardes que se hacen eternas porque los chicos acaban aburridos y tu estresada por qué no sabes con que más entretenerlos.
Esas tardes están solucionadas si te haces con un buen repertorio de material colegio. Con esto conseguirás que las tardes sean mucho menos monótonas, más divertidas y más didácticas. Conseguiremos que los chicos se lo pasen bien y nosotros conseguiremos pasar ese tiempo pintando con ellos, coloreando, recortando, pegando, haciendo manualidades… son muchas las cosas que se pueden hacer y que conseguirán que as horas pasen volando.
Hay quien tienen la creencia de que el material escolar solo sirve para tenerlo en el colegio, solo debe de estar en las aulas y están muy equivocados, tener en casa un cajón o una caja destinada a los materiales para las manualidades, a los materiales de dibujar, de ser creativos, la caja de los sábados se puede llamar, con ella conseguiremos lo que muchos buscan fuera de casas, pasar un rato agradable con los más pequeños. Además en las actividades pueden entrar toda la familia, se puede hacer un concurso de dibujo en el que incluso participe la abuela con premio incluido, podemos inventar juegos de palabras y dibujar lo que decimos, podemos hacer muchas cosas que son divertidas y muy didácticas.
No hace falta salir al parque todos los sábados o domingos, no hace falta pasar la tarde en el centro comercial, no hace falta salir a gastar dinero en cualquier tienda, para pasar un buen rato con nuestro hijos solo tenemos que tener un poco de tiempo y ganas de pasarlo con ellos, así, con muy poco, con unos lápices y unas hojas de colores podemos hacer que una aburrida tarde de sábado se convierta en una maravillosa velada con los niños jugando a ver quien dibuja mejor o simplemente dibujando lo que a cada uno le apetezca, no es el cómo, ni el cuándo, es el con quien y en familia las cosas se hacen mucho mejor.
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